Por Luis Fioretti

Sin dudas, visitar cavas puede ser una experiencia grata, exclusiva y memorable para todos. En esta ocasión me referiré a un lugar que todo amante del vino debe conocer en Paraguay: la bodega más atractiva que podamos imaginar, ¡en un supermercado!
No se precipiten pensando que leerán acerca de una “Sección Vinos” de súper, con nombres masivos (siempre buenos claro); nada más lejano… Esta “Sección Vinos” es como pasar de una dimensión a otra en dos pasos.
Mucha previa, ¡lo sé!, al grano entonces: el lugar que me inspira tantos elogios es el apartado de bebidas espirituosas del supermercado Real de Villamorra. Para quienes lo hayan visitado, concordarán en que no se trata de un simple espacio en góndola adentro de un súper, tampoco una mero “sección”. Para quienes  aun no fueron, van estas líneas especialmente dedicadas.
La cava nace en el año 2006 como una idea de Jorge Riquelme, propietario de la cadena de supermercados “Real”. Desde aquel entonces, el “seleccionado” de etiquetas está en manos del señor Ricardo Gismondi, un conocido conocedor (valga el juego de palabras) argentino radicado en nuestro país desde hace muchos años, quien con apoyo de dos asistentes se encarga de guiar al visitante hacia la etiqueta que acompañe mejor sus gustos y/o momentos.
Pero en la cadena Real solo la sucursal de Villa Morra cuenta con instalaciones semejantes: una gran sección ubicada en el extremo noreste del local, orientada a bebidas espirituosas en general, pero enfocada en el vino, que de hecho es la temática decorativa.
Los detalles abundan: la luz ambiente tenue, pensada en proteger el vino y en cada rincón la lumínica se adecua exclusivamente a los diversos espacios, considerando categorías y delicadeza de las etiquetas. Incluso el suelo fue diseñado para reducir la vibración y sonidos del visitante, de manera a cuidar los vinos y demás espirituosas allí residentes.
Podemos acceder al espacio con nuestro carrito de compras después de recorrer todo el súper sin más que caminar. No hay puertas ni separación alguna, mas su ambientación demarca claramente su territorio: una recreación viva y detallada de una bodega antigua.
El lugar alberga por supuesto a los vinos de alta rotación, pero también se tienen en cuenta a etiquetas raras y difíciles de conseguir. “Creo que duplicamos o triplicamos las marcas que pudieran tener otros”, nos cuenta Gismondi. Incluso destaca que los demás supermercados no tienen el espacio físico para contener tal cantidad de variedades, limitando sus posibilidades.

CUIDADA PUESTA EN ESCENA. Dentro de la presentación general sobresalen dos sectores de vinos Premium, donde el cuidado va un paso más allá, adecuando la posición de guarda para unas 75 botellas cada uno.
En la góndola izquierda encontramos vinos espumantes y Champagnes. A la derecha están los vinos más accesibles en precios, sin dejar de cuidar la calidad. En el espacio central, sobre una mesa amplia, podemos apreciar etiquetas destacadas y productos en promoción, junto a una singular decoración donde predomina una antigua caja registradora.
En otro nicho, hacia el Este, apreciamos vinos elegidos por su singularidad, resaltados como en una exposición de arte. Destacan sobre todo por las atractivas y peculiares botellas. También llama la atención un apartado dedicado a vinos franceses, españoles, italianos, sudafricanos, neozelandeses y americanos.
Es un lugar de experiencias. Ofrece tal variedad, calidad y ofertas a precios propios de supermercado, que se convierte en el campo ideal para aquellos con anhelos de experimentar. Los clientes se acercan buscando más calidad.
Quienes tienen un buen poder adquisitivo se animan a probar más y más, y “de repente hay gente que dice ‘voy a ahorrar toda la semana y probar algo más especial’, basándose en nuestras recomendaciones y degustaciones que hacemos”, recuerda Gismondi. ¿Cuándo se hacen las degustaciones? Viernes por la tarde, sábados en la mañana y la tarde, y domingos por la mañana.

MUCHO MÁS. Interrogado sobre qué vino se busca más, Gismondi no duda su respuesta: “el Malbec”. Por otro lado, cuenta que el consumidor medio prefiere el vino joven, frutado, fácil de tomar. Afirma también que el vino de corte, tipo europeo, es para un público más reducido, prefiriendo los locales los varietales, “inclusive en vinos premium busca un varietal”, afirma.
Otro dato muy interesante son las promociones: generalmente dadas los fines de semana, los diversos exportadores ofrecen al público interesantes ventajas en forma de descuentos, llegando a niveles del 25%. También las diversas tarjetas de crédito ofrecen lo propio, con descuentos eventuales que llegan incluso a 30%. El súper tiene también sus ofertas, en especial los días miércoles y fines de semana.
El supermercado Real Villa Morra se encuentra en la Avenida República Argentina esquina Boggiani.