Por Alejandro Sciscioli
Nunca voy a cansarme de decir que, cuando uno comparte un buen vino con amigos que saben apreciar lo que está en la copa, el disfrute se multiplica. Y claro, esta afirmación aplica al producto sobre el cual me referiré hoy, el Trapiche Iscay Syrah Viognier2010.
Todo comenzó hace unas semanas atrás, cuando me encontraba realizando una entrevista a Juan Esteban Pina, miembro del equipo enológico de Trapiche, quien llegó al país para participar de una serie de cenas maridaje.
Al finalizar la charla, Doreen Díaz, ejecutiva comercial de la firma que importa localmente los productos de la bodega argentina, llegó con un regalo que me encantó de antemano, el vino que ahora motiva el artículo.
De hecho, durante la conversación con “Juanes” habíamos tocado el tema de esta etiqueta, elaborada según la usanza francesa de la Côtes du Rhône (AOC que se aplica a vinos producidos en ambas márgenes del río Ródano). Su formulación es 97% Syrah y 3% Voignier.
Recuerdo un breve párrafo de esa charla, con declaraciones del enólogo, que ayudarán a comprender mejor la filosofía enológica aplicada a la etiqueta: “Iscay quiere decir dos en quechua, la lengua que hablaban los pueblos originarios de esta zona de Mendoza (…) Así, Iscay tiene un doble significado: dos enólogos padres (Daniel Pi, enólogo Jefe de trapiche, y el estadounidense Joey Tensley, quien tiene una bodega en California) y dos cepas aunadas, la tinta Syrah y la blanca Viognier”.
CON AMIGOS, COMO CORRESPONDE. El descorche de este vino demoró un poco, ya que mi intención era compartirlo con personas que, tal como indiqué al principio de este texto, supiesen apreciar lo degustado.
Por suerte, no hace mucho logramos coincidir y, con mi esposa y la pareja de amigos (ambos sommeliers), nos dimos a la gratificante tarea de la degustación.
¿Y con qué nos encontramos? Con un vino muy, pero muy novedoso. Su color es rojo profundo y muy brillante y, en nariz, enamora con las típicas notas del Syrah (especias, fruta roja, un levísimo dejo a ciruela pasa), más unos desconcertantes pero fantásticos toques florales y a durazno (sin dudas aportados por el Viognier) y el aporte de la madera (vainilla). En boca es también muy seductor: fresco y con una excelente acidez; sus taninos son dulzones; es también redondo y sedoso.
Para resumir esta historia creo que todo podría resumirse en una palabra que ayude a describir a este gran vino: Cautivante.
Lo mejor de todo es que el Trapiche Iscay Syrah Viognier2010 está presente en el mercado local esperando a que los consumidores lo adopten. Animate, no saldrás defraudado.
Clic acá para leer la entrevista completa a Juan Esteban Pina.
Iscay Syrah Viognier, novedoso y cautivante
Nuestro editor degustó y se enamoró de esta etiqueta de Trapiche elaborada según la usanza francesa de la AOC Côtes du Rhône. Su formulación es 97% Syrah y 3% Voignier.
Noviembre 30, 2013