Por Luis Fioretti
Gracias a un acuerdo, dos conocidas empresas argentinas dedicadas al vino han unido sus rumbos: NQN será miembro de Bodega Del Fin del Mundo (BDFM).
La información, que nos llega desde la web www.areadelvino.com, cuenta que los directivos de NQN, un emprendimiento familiar, tras meditar ofertas de grupos extranjeros concretó su venta a Fin del Mundo, perteneciente al Grupo América, el pasado 24 de enero.
Ambas bodegas se encuentran en San Patricio del Chañar, un joven terruño vitivinícola ubicado en provincia de Neuquén, allí donde la Patagonia comienza en toda su maravillosa desolación, y donde se producen vinos cada vez más interesantes. NQN dispone de 160 hectáreas de viñedos, más 850 para plantaciones futuras, una bodega con capacidad para producir 1,8 millones de litros y una flamante posada. Sus marcas destacadas son: Malma, Malma Reserva, Colección NQN y Picada.
No obstante, NQN seguirá siendo independiente. La idea es potenciar la bodega con la estructura comercial de BDFM y “desarrollar sus marcas, que tienen mucho potencial", según comentó Julio Viola, socio y fundador de BDFM.
"Con esta adquisición pensamos reforzar nuestra presencia en el mercado a la vez de potenciar las marcas de la bodega NQN en nuestro país como en el exterior, y afianzarnos definitivamente como bodega patagónica referente", afirma Viola.
BFDM inauguró su bodega en 2003, creciendo desde entonces hasta producir hoy 9 millones de litros. Nacida como propiedad de la familia Viola, en 2009 ingresa a una sociedad con la familia Eurnekian, propietaria del Grupo América. Cuenta con 850 hectáreas de viñedos de alta calidad enológica en producción, con cepas tintas Malbec, Pinot Noir, Cabernet Sauvignon, Merlot, Tannat y Syrah, y blancas como Chardonnay, Sauvignon Blanc y Viognier. Hoy sus vinos llegan a toda la Argentina y a 34 destinos mundiales, entre los cuales está Paraguay.
Sus marcas más notables: Postales del Fin del Mundo, Ventus, Newen, Fin, Special Blend Del Fin del Mundo y Reserva Del Fin del Mundo, entre otras. Además, en 2010 inauguró “Experiencia Del Fin Del mundo”, un restaurant gourmet de alta gama, ubicado en pleno corazón de Palermo, Buenos Aires, que permite acercar la bodega al consumidor.
Según Matías Gainza Eurnekián, director del Grupo América en este rubro, la estrategia del mismo durante 2011 fue crecer, política que continuará este 2012. El año pasado invirtió en maquinaria y en aumentar un millón de litros la capacidad de BDFM. Paralelamente, también está realizando diferentes inversiones en el exterior, con olivares en Marruecos y viñedos para vinos premium en Armenia.
Este holding “América”, de capitales argentinos, se dedica a rubros muy diversos, desde la administración de multimedios de comunicación, aeropuertos y obras viales, hasta el mundo agropecuario e industrial.
Así, esperamos pronto conocer al nuevo miembro de la familia de Bodegas del Fin del Mundo aquí en Paraguay.
NQN hasta el Fin del Mundo
Bodega del Fin del Mundo pateó el tablero vitivinícola en la Patagonia argentina y adquirió a su rival NQN, buscando transformarse en el referente enológico indiscutido de los vinos provenientes de esa desolada pero hermosa región del planeta.
Febrero 04, 2012