Por Alejandro Sciscioli
Para quienes gustamos de disfrutar el vino, pocas sensaciones se comparan cuando degustamos por primera vez una etiqueta y ésta nos subyuga hasta dejarnos un tremendo ¡guau! en la boca.
La última vez que tuve esa sensación fue no hace mucho, durante la última cata organizada por Parawine.com, en la cual pudimos compartir un momento ameno con lectores, anunciantes y amigos. La marca en cuestión es TH Pinot Noir de Undurraga 2009, uno de esos vinos que “se evaporan” en la botella debido a que quienes lo prueban llenan sus copas una y otra vez.
Es cierto, el momento ayuda mucho para que un vino nos guste más o menos. Y en este caso, el momento era óptimo: todos sentados en torno a una larga mesa en el restaurante La Cocina Hereje, degustando un fantástico menú de picoteo ideado por Alicia Martínez Trueba, propietaria y alma de la casa.
¿Qué opinamos del vino? Cito textualmente lo que ya publicamos en la crónica completa de esa noche. “Se trata de un Pinot Noir proveniente del valle chileno de Leyda (el nuevo descubrimiento de la viticultura trasandina), terroir ideal para esta cepa por ser un lugar de clima frío. Su color es el típico de la variedad, rojo rubí suave. En nariz, un hallazgo: mucho caramelo de café y algo de especias; aparece también la fruta roja cocida luego de girar el vino en la copa. En boca es de cuerpo medio, algo dulzón, sedoso y con un delicioso retrogusto frutado; persisten las notas a caramelo de café (lo que no extraña, debido a que tiene 10 meses de crianza en barricas francesas nuevas y usadas). Me quedé con ganas de más”.
Adicionalmente se puede agregar que todos los presentes elogiaron con entusiasmo lo que había llegado a sus copas.
VINIFICACIÓN. Buceando la página web de la Viña Undurraga nos enteramos de que las uvas para este vino fueron cuidadosamente transportadas a la bodega donde se realizó una rigurosa selección, velando por que sólo uvas maduras y sanas pasaran a la cuba. Se retiraron los granos verdes, demasiado asoleados o deshidratados.
Tras el despalillado, los granos fueron sometidos a un proceso de maceración en frío bajo condiciones anaeróbicas durante 7 días. Durante este tiempo, se produjo la extracción enzimática del color y una primera fermentación al interior de la uva, lo cual preestablece un perfil aromático afrutado especialmente prominente en el vino. Posteriormente se realizó la fermentación general a 27°C-28°C durante 10 días, realizándose un pigeage o “piseage” manual dos veces al día. El vino permaneció en contacto con sus lías y orujos durante otros 5 días para potenciar su estructura. Posteriormente fue guardado en una selección de barricas de roble francés, fabricadas en Borgoña, 20% de ellas nuevas, donde se produjo la fermentación maloláctica y fue envejecido por 10 meses.
Las uvas proceden de una pequeña parcela de 2,97 hectáreas en la D.O. Leyda, una conocida subregión de San Antonio, a 14 kilómetros del Océano Pacífico.
Más allá de estos detalles técnicos, particularmente creo que hemos tenido la suerte de encontrar un vino que se merece estar en tu copa. No te lo pierdas.
Una muy agradable sorpresa en la copa
TH Pinot Noir de Undurraga 2009 nos dejó con la boca llena de vivas sensaciones y la alegría de haber conocido un ejemplar que muy bien se ha ganado un sitio en nuestra bodeguita particular.
Mayo 19, 2012